Cuando tenemos un amigo o un familiar que presenta conductas adictivas, sean estas hacia sustancias psicoactivas, juegos u otros, muchas veces lo que hacemos como familiares de esta persona es señalar o buscar las razones por la cuales este ser querido ha estado presentado esta conducta y qué lo llevo a ello.
Por lo tanto, los familiares al buscar ayuda para ellos tienden a creer que con llevarlos al proceso psicológico es suficiente para ver la mejoría y tiende a dejarlos a expensas del proceso, a lo cual muchas veces se observa más bien cómo desertan y no ven como un problema sus conductas.
Es aquí, la importancia del papel de la familia, debido a que ellos durante el proceso son un pilar fundamental en el cambio de la persona.
¿En qué podemos ayudar como familia?
Partiendo de lo más simple: acompañarlo en cada sesión durante el proceso; muchas familias creen que como el proceso es de la persona, es responsabilidad de la persona, no obstante en una primera instancia, si no fuera por la familia, la persona por sí mismo no llegaría a solicitar ayuda, por tanto, nosotros como allegados a éste, debemos de entender que estar junto a él y ser observadores del cambio es primordial. Como dice el célebre escritor Richard Bach, “el vínculo que te une a tu verdadera familia no es el de la sangre, sino el del respeto y la alegría que tú sientes por las vidas de ellos y ellos por la tuya”.
MPs. Javier Rivera