La realidad (o mi realidad) sobre las clases virtuales para niƱos preescolares
- Daniela Soto - Psicóloga
- 11 jul 2020
- 2 Min. de lectura
La realidad (o mi realidad) sobre las clases virtuales para niƱos Preescolares
Antes que nada, destaco la increĆble labor de las maestras de mi hijos, han sido dedicadas, ingeniosas, preparan y envĆan material cada semana y para mi hijo menor, cada vez que vamos por el material, es como ir a recoger una cajita de sorpresas para iniciar la semana.
Les comparto desde mi perspectiva como mamÔ y psicóloga la realidad sobre clases virtuales para niños preescolares:
-No siempre tienen ni pueden poner atención ante una pantalla y hay muchos estĆmulos distractores.
-EstĆ”n en la comodidad de su casa, por mĆ”s especial que sea el lugar que adaptemos para sus clases virtuales no se asemeja a estar en su clase, donde pueden tener contacto directo con su maestra y con sus compaƱeros donde intercambian miradas de complicidad, risas; ademĆ”s en esta modalidad no hay contacto fĆsico el cual muchas veces funciona como una seƱal o cariƱo.
-El tiempo de espera es distinto, en la clase, los niños saben que esperan con los gestos de la maestra y a los minutos les da la palabra, ante una tablet o computadora no saben realmente si lograron captar la atención de la maestra, porque la verdad no siempre lo logran y pasan desapercibidos.
-Es bastante retador que puedan realizar la clase sin apoyo de un adulto, en muchos momentos necesitan contención para sus emociones, una explicación mĆ”s especĆfica y personalizada.
-Las clases virtuales no siempre son divertidas y el aprendizaje no puede dejar de ser divertido.
-¿Y el espacio para conversar, para socializar, para conectarse emocionalmente? Las instituciones preescolares no sólo forman académicamente y ante la necesidad de la modalidad virtual ¿estamos velando por la parte socio-afectiva de los niños? Cuando escuchamos a los niños y tomamos en cuenta sus pensamientos y sentimientos ellos se disponen también a escucharnos a nosotros.

-Muchas veces la clase se convierte en una lucha de poder con los padres o encargados de l@s niƱ@s, ocasionando momentos de caos a nivel familiar.
Para edades preescolares, considero que es importante la flexibilidad, no tienen que conectarse todos los dĆas, debemos escuchar, validar y comprender sus emociones para darnos cuenta si estĆ”n abrumados. Son preescolares, habrĆ” mucho tiempo para enseƱar las responsabilidades y la importancia del estudio, pero esto se hace sin transgredir sus necesidades. Debemos comprender que si el niƱo o la niƱa no estĆ” en las mejores condiciones socio-emocionales no podrĆ” aprender ya que no puede acceder eficientemente a funciones ejecutivas.
Los padres, familiares, maestros que brindan conexión emocional, seguridad y una rutina estructurada que ofrece predictibilidad a los niños aportan mÔs beneficios que practicar sumas y restas, durante esta época de pandemia.
Ante el Covid-19 muchos hogares se convirtieron en oficinas, aulas, sala de reuniones cambiando asĆ la dinĆ”mica familiar. AƱadiendo el estrĆ©s e incertidumbre de la situación, es usual un poco de caos mientras nos adaptamos a la nueva realidad, al ordenar las nuevas prioridades, una de ellas debe ser proteger los vĆnculos con nuestr@s hij@s entendiendo asĆ los momentos difĆciles y poder ser de apoyo brindando contención emocional.
Finalmente, para ser capaces de realizar tan importante labor, debemos cuidarnos a nosotros mismos, priorizando las necesidades que nos conducen al auto cuidado, como nos dicen en el avión āantes de ayudar a otra persona, póngase su mĆ”scara de oxigenoā.
Daniela